Plan de la UCR para producir un medicamento contra el COVID-19
Si una persona se recupera satisfactoriamente de la enfermedad del COVID-19, su organismo genera una inmunidad (resistencia) que puede ser extraída del plasma de su sangre y ser usada para salvarle la vida a otras personas con cuadros agudos provocados por el virus SARS-COV-2.
Esa inmunidad es gracias a los anticuerpos o inmunoglobulinas que neutralizan dicho virus y Costa Rica posee todo el potencial necesario para generar dicho tratamiento y ponerlo a disposición del país.
¿Cómo se logrará? La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), institución que propuso la iniciativa, contará con el apoyo del Instituto Clodomiro Picado de la Universidad de Costa Rica (ICP-UCR), el cual posee la capacidad técnica y el recurso humano para efectuar los procesamientos requeridos en la purificación y formulación de los anticuerpos.
Pero el ICP-UCR y la CCSS no trabajarán solos. El Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa), junto con el Laboratorio Clínico y el Banco de Sangre de la Universidad de Costa Rica (LCBS-UCR), también sumarán fuerzas. Cada uno de ellos coordinados por la CCSS.